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"El acento es el alma del discurso".
Jean Jacques Rousseau

"No hay discurso dirigido a la multitud que no tenga el doble fin de aclarar la situación y de sugerirle algo a la masa".
Benito Mussolini

"Es absurdo sostener que un hombre debería estar avergonzado de ser incapaz de defenderse con sus extremidades pero no de ser incapaz de defenderse con el discurso y la razón cuando el uso del discurso racional es más distintivo del ser humano que el uso de sus extremidades".
Aristóteles


Hasta ahora hemos cubierto los puntos principales de tu discurso, cómo formularlos y organizarlos. Ahora debemos enfocarnos en el soporte de esos puntos principales, la evidencia que validará nuestras afirmaciones. A modo de recordatoria, déjame recalcarte la estructura de un discurso improvisado o corto.

Orden del discurso


1. Introducción
2. Enunciación de la tesis general
3. Vista previa de los puntos principales (los puntos que sustentan la tesis)
Primer punto principal
4. Enunciación del primer punto principal
5. Proporciona y explica dos piezas de evidencia ilustrando el primer punto.
6. Concluye tu primer punto
Segundo punto principal
7. Enunciación del segundo punto principal
8. Proporciona y explica dos piezas de evidencia ilustrando el segundo punto.
9. Concluye tu segundo punto
Conclusión
10. Enuncia de nuevo tu tesis y revisa tus dos puntos principales
11. Concluye tu discurso

Los puntos que hemos tocado hasta el momento han sido:

- Introducción: Habilidades básicas para hablar en público
- Aprende a improvisar un discurso: Parte 1: Estructura de un discurso improvisado y directrices para evaluar un discurso
 - Aprende a improvisar un discurso: Parte 2: Ideas para formular buenos puntos principales
 - Aprende a improvisar un discurso: Parte 3: Consejos para organizar tus puntos principales
 - Aprende a improvisar un discurso: Parte 4: Recomendaciones para redactar y presentar convincentemente tus puntos principales


"Todo discurso bien preparado está ya pronunciado en sus nueve décimas partes" Dale Carnegie

Ahora, para proponer buenos soportes, conviene preguntarse en qué conocimiento o experiencia nos basamos para intentar defender un determinado punto. Al intentar responder esta pregunta, ten en mente dos cosas:

1. ¿La evidencia se relaciona con el punto principal que se supone está soportando?
2. ¿La evidencia es concreta?

Por supuesto, la evidencia debe relacionarse con el punto principal. Tu trabajo es explicar y dejar clara esa relevancia. Después, debes enfocarte en los detalles, los ejemplos específicos que van a ilustrar tu evidencia. En este punto, debes tratar de que tus soportes sean muy detallados, porque así puedes relacionarlos mejor con los puntos principales. Si tus soportes no son detallados, no podrás hablar mucho de ellos en tu discurso, se te acabará el hilo demasiado pronto.

Así que procura no ser muy vago con tus soportes. Los soportes son los que te tomarán más tiempo desarrollar y exponer. Busca ejemplos que puedas describir y explicar con sumo detalle pero que a un tiempo se relacionen estrechamente con tus puntos principales.

Si es necesario, intenta pensar en ejemplos hipóteticos (pero plausibles). Siempre busca algo ilustrativo. Presenta ejemplos que por sí solos hagan comprensibles tus puntos principales.

Ideas para presentar buenas pruebas de tus argumentos
Usa tu lenguaje corporal para hacer énfasis y distinguir las partes de tu discurso

Recomendaciones para discutir la evidencia


Ahora, cuando estés discutiendo tu evidencia, debes asegurarte de que las personas distingan claramente tus puntos principales de tu evidencia. Recuerda que las personas no tienen una copia física de lo que estás diciendo, ellos no pueden distinguir los "puntos aparte", las frases subrayadas, las cursivas o las negritas. Y tampoco pueden devolverse. Solo te estan escuchando a ti, en tiempo presente. Guiándose por tu forma de presentar el discurso, las personas deben entender cuáles son tus ideas prioritarias y cuáles son secundarias.

Cuando abordes cada punto principal, asegúrate de afirmarlo, explicarlo, probarlo y concluirlo. Inclusive este método se usa para escribir buenos párrafos:

1. Afírmalo


Enúncialo como ya lo hemos discutido en post previos.

2. Explícalo


Desenvuelve el tema principal y prepara a tu audiencia acerca de las pruebas que tienes. No saltes a la evidencia de una vez. Dale a tu audiencia un poco de tiempo para que se prepare, para que procese tu punto principal y lo entienda completamente.

3. Pruébalo


Es recomendable que des una vista previa de tus pruebas. Enuncia las pruebas que tienes primero y luego desarrolla una por una.

Para discutir tu evidencia, relaciónala siempre con tus puntos principales. No presentes la evidencia así no más. Por cada pieza de evidencia existirán cientos de cosas que puedes decir acerca de ellas, así que es mejor que seas breve y sólo digas cómo tu evidencia está relacionada a tus puntos principales. Si te encuentras discutiendo algo que no se relaciona con tu punto principal, sigue y pasa a otro punto.

Siempre explica dos cosas:

A. ¿Cómo se relaciona con la evidencia con el puento principal?
B. ¿Por qué la evidencia se relaciona con el punto principal? ¿En qué sentido?

Deja en claro siempre por qué se presenta esa evidencia y no otra y cómo se va a relacionar con el punto principal.

Debido a que existen cientos de cosas que puedes discutir acerca de los soportes, es recomendable que uses la siguiente estrategia: Discute la evidencia un poco y relaciónala con el punto principal. Muévete luego hacia otro poco de evidencia y antes de perderte en demasiados detallas, relaciónala otra vez con la evidencia y al final concluye todo el punto.

4. Conclúyelo


Devúelvete al punto. Restablece el punto y refuerza su relación con la tesis general.

Es todo lo que necesitas hacer.


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